

Este año, Casarena renovó enteramente las líneas de vinos, las cuales fueron presentadas en los distintos espacios de la bodega: en el ingreso, Casarena Malbec Rosé; en el jardín delantero, Casarena Estate; en la terraza, Casarena Sinergy; en el interior del restaurante Casarena Single Vineyard y en la cava, el “altar” de DNA, la línea ícono de la bodega.
Claudia Piedrahita, CEO de Casarena, explicó: “Hicimos un análisis minucioso del mercado y entendimos que necesitábamos refinar nuestro portfolio y generar un mensaje más cercano de lo que hacemos. Este rediseño es un gran impulso hacia la premiunización de nuestra marca”.
También señaló que “para Casarena Golden Hour invitamos a clientes, proveedores, distribuidores de las principales ciudades del país y periodistas.
Casarena está cada vez más sólida y más comprometida con su lugar en el mundo, que es Luján de Cuyo. "Tanto la familia Dartley como quienes integramos esta empresa estamos convencidos de que nuestra marca tiene un gran futuro en todos los mercados mundiales, y por ello se trabaja y se invierte en forma constante para lograr ese objetivo”, expresaron desde la bodega.
En esta ocasión, el restaurante Savia Cocina Casarena presentó algunas de sus propuestas gastronómicas: islas de quesos de “La Linqueñita” y confituras, espárragos con salsa holandesa, falafel, profiteroles de ave, empanadas mendocinas, gazpacho de frutillas y remolacha, tartare de trucha, conejo con topinambur, bombas de papa con mayo kimchi y ensalada. Para lo dulce, compacto de chocolate con crema y tofFee, financier con helado de sÉsamo y gomasio y cheescake de dulce de leche con crema.