El estudio mendocino elegido por Michel Rolland que atrae a clientes en Francia y Estados Unidos

HC Consultores, fundado por Luis Hurovich, nació hace más de 50 años en Buenos Aires. En 2013 comenzó a operar en Mendoza de la mano de Adrián Cozzolino.

“Comencé a trabajar con Luis y luego de unos años me ofreció asociarme y abrir una sede en la provincia. El primer gran cliente de la consultora fue el destacado enólogo Michael Rolland, con el proyecto Clos de los 7, lo que nos abrió las puertas para trabajar con proveedores y bodegas de afuera, principalmente de Francia y Estados Unidos”, destaca Adrián.

En Mendoza, HC Consultores se ubica en la calle Huarpes de la Quinta Sección, a donde trabajan 18 personas. Se especializa en servicios contables, outsourcing administrativo, auditorías, comercio exterior, sueldos y legales.

“No somos un estudio tradicional, sino que nos involucramos en la administración de cada negocio, en sus actividades y expectativas a través de un vínculo muy cercano con cada cliente. La tendencia a nivel mundial es que las estructuras sean cada vez más chicas, lo que genera nuevas oportunidades de crecimiento y expansión para estudios y consultoras.

Sin dudas, una de nuestras ventajas competitivas es el gran equipo con el que contamos, conformado por profesionales jóvenes en permanente actualización y adaptación a distintas culturas, idiomas y entornos”, señala.

Lo que viene

Al consultarle por el balance del 2024, Adrián Cozzolino, comenta: “Fue un año de grandes cambios y mucho estudio en cuanto a nuevas resoluciones y normativas, sobre todo en la parte de comercio exterior.

Crecimos y nos diversificamos hacia otros rubros e industrias, entre ellos, la minería, el petróleo y la tecnología. La proyección es seguir en ese camino de consolidación de nuestros servicios, tanto en el mercado interno como externo.

También hemos incorporado la Inteligencia Artificial en el día a día. Ha pasado a ser una herramienta de trabajo muy importante que nos permite acelerar y optimizar procesos. Estamos convencidos de que la clave está en aprender a utilizarla.

Para 2025 somos optimistas. Creemos que la apertura del mercado, el tipo de cambio y la flexibilidad en las normativas atraerán nuevas inversiones, lo que será beneficioso para todos”.